lunes, 21 de febrero de 2011

IMPORTANCIA DE LA ARMONÍA EN LOS CONYUGES





La armonía y el buen entendimiento entre dos cónyuges es vital no solo para que su matrimonio perdure si no para la formación de sus hijos. De ahí que urge una rectificación de conducta en los hogares que antes de convertirse tuvieron muchos conflictos, hacia una vida armoniosa y pacifica con el poder del Señor.
VERSICULO PARA MEMORIZAR: Proverbios: 15:1
INTRODUCCION
Un adolescente me gritó: “¿Sabe que yo nunca me voy a casar?” y le dije: ¿Por qué no? Me respondió: “Solo de ver cómo pelean mis padres, se me han quitado las ganas.” Un craso error de algunos cónyuges es que pelean de manera imprudente como si fueran los únicos habitantes del universo y lo hacen delante de sus hijos.
¿Cómo deseas que sean tus hijos?:Tímidos, introvertidos, con bajo auto aprecio y un carácter inestable, o ¿quieres que sean valientes, aguerridos, con un sano auto precio y un carácter estable y fiarme?.
Es oportuno decidir ahora, que tipos de hijos queremos formar y al termino de esta clase, tomar las medidas convenientes para lograrlo con ayuda de “DIOS”.
1.- “ARMONIA ENTRE LOS PADRES Y LA RELACION CON LOS HIJOS”
1.-LA AMARGURA: La voz griega “PIKRAINO”, viene de la raíz PIK, que significa cortar, pinchar en la voz media significa SER ASPERO.
En Colosenses 3:19 Dice la biblia que los esposos no deben ser ásperos con su esposa.
La actuación que les puso tenga con su esposa, repercutirá en la vida de su esposa y de sus hijos.
El mejor servicio que un varón le puede dar a sus hijos es mostrar ante ellos un trato amoroso, amable, justo y respetuoso a su esposa. Cuando los hijos desde niños miran como papa ama a mama se establecen un carácter de:
1) Hijos confiados y seguros
2) Hijos con auto aprecio
3)Hijos con un carácter estable
2.-TRAGICO, EL CAMBIO DE TRATO HACIA LA ESPOSA
Se cuenta el cambio de trato en una pareja, que acontece en muchos matrimonios.
Cuando eran jóvenes solteros, él como todo novio enamorado, iba por ella cada tarde para pasar juntos largas horas en el parque hasta que entrada la noche brillaban las estrellas. Al brillo de las estrellas, ella solía preguntarle a él: “Mi vida, ¿De qué color es el cielo?” y el con tono varonil y conquistador le respondió casi al oído: “Azules como tus ojos”.
Paso el tiempo, se casaron, llegaron como los hijos, la vida se hizo rutinaria, ella añoraba las tardes cuando el la sacaba al parque y principio a insinuarle su anhelo.
El indefectiblemente le contestaba,: “Si quieres ir ve al parque lleva a lo9s niños y déjame descansar …vengo agotado”. Pero un día al fin sintiéndose presionado por ella el accedió a ir al parque con ella, se sentaron en la misma baca y el no tenia platica alguna, entonces ella principio a decirle con voz tímida y baja: “Mi vida”, el contestó toscamente: “¿qué quieres?”, ella pregunto: “ ¿ De qué color es el cielo?”, el se incorporo de inmediato y le respondió con un desplante: “Ya solo eso me faltaba, que te estés quedando ciega” ¿Qué no ves que el cielo es azul?.
3.- GRADOS DE AMARGURA.
La amargura tiene diferentes niveles de desarrollo y de acuerdo a dichos niveles así serán sus consecuencias en el hogar. En Hechos 8:23 Se usa de modo metafórico de extremada maldad. Nuestras Biblias lo traducen como: “HIEL DE AMARGURA”.
En romanos 3:14 se utiliza como: “MALEDICENCIA”. Maledicencia tiene dos significados. Uno de ellos es, hablar con maldiciones y el otro, hablar con mordacidad. Mordacidad es hablar con palabras ásperas, corrosivas, que ofende con todo lo que dice, que critica todo de modo desmedido e inmisericorde. Los hijos que hablan así, han sufrido mucho una relación inadecuada entre sus padres. Viven en continuo conflicto en el hogar.
En Efesios 4:31 se nos habla de gente que aborrece con amargura. Muchos hijos aborrecen a sus padres y hablan de ellos con amargura, porque estos nunca les brindaron un genuino amor, sino solamente conflictos diarios.
En Hebreos 12:15 se habla de un caso extremo en cuyo corazón hay raíces de amargura. Quien tiene raíces de amargura dará frutos amargos. Papás ¿Quieren hijos amargados o felices?

Es hermoso ver cómo, en términos generales, los jóvenes cristianos saben cumplir sus promesas de amor, es una bendición verles ya casados y con hijos, amándose y respetándose.
Y haciendo de sus hogares el mejor lugar para formar a las nuevas generaciones.
“CONCLUSION”

Si los papás estuvieran conscientes de estos esquemas y los construyéramos cada día, en nuestros hogares, gozaríamos de una familia sana y feliz.
De hecho, ese es el objetivo general del presente libro.
Proclamamos en fe, que DIOS está construyendo hogares más que vencedores con nuestra participación activa y responsable.
Que quienes no conocen a Jesucristo como Señor y Salvador, vean en nosotros la tierra deseable que ellos han soñado tener.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Gracia y Paz.

Es un enorme privilegio el poder decir que en mi hogar, quien gobierna y dirige nuestras vidas, es Jesucristo.

Mi familia conformada por mi amda y fiel esposa Mariana Bernal y mi pequeña princesa, mi hija Jadasha Rodriguez, damos gracias a Dios por las gran bendición de habernos llamado para ser hijos suyos y formar un hogar MAS QUE VENCEDOR.

Así mismo, oramos por cada una de las familias que se congregan en las Filadelfias dentro y fuera de la República Mexicana.

Dios les bendiga.

Unknown dijo...

Gracia y Paz



En una ocación, estando camino a la óptica del tío de mi esposa, recordando alguna de las cosas que Dios me ha permitido atravesar en mi caminar con él, ella miraba por la ventana y se percataba de la gran distancia que hay de nuestro hogar en Azcapotzalco hasta la Iglesia central úbicada en Calzada de los Misterios. Mi esposa me preguntaba: "¿en verdad si caminaste en una ocación en domingo desde tu casa en Azcapotzalco hasta la iglesia en Calzada de los Misterios?".



Y yo le respondí: "¿Recuardas cuando en varias ocaciones, en nuestro noviazgo, caminamos grandes distancias por que alomejor no traía yo mucho dinero para los pasajes y lo hacias sólo para estar juntos e ir a donde queriamos?"



Ella me dijo: "Sí. Pero era diferente, por que cuando uno esta enamorado perdidamente de otra persona, hace cosas un poco disparatadas."



Y yo dije: "Entonces, ya que tu misma caminaste a mi lado grandes distancias solo por estar enamorada de mí, a pesar de que en tu interior no lo querias hacer, ¿cómo crees que estaba en mi interior como para hacer algo que pareciera tan disparatado?, ¿no crees que estaba proyectando el amor que hay en mi corazón hacia Dios?"



Recordando esa parte en mi caminar con Dios, relfexionaba sobre el amor que proyectamos como hijos de Dios. ¿Es en realidad que damos todo el amor que podemos dar a Dios, a su obra, a su pueblo a nuestros lideres y hermanos?. Cómo padre de familia primeriso, me preocupa el ejemplo que he de darle a mi hija, la forma en que debo de instruirla en la palabra de Dios, y en el trabajo que se debe desarrollar como Sacerdotes de Dios.



Nunca debe cesar ni menguar ese primer amor que se derrama de nuestro corazón cuando llegamos a los pies de Cristo por primera ves. Así mismo, en nuestro hogar no debemos de cesar ni truncar el amor por nuestra esposa, nuestros hijos, no pensar en el "hubiera" sino en el "ahora", orando por nuestro hogar, siendo los varones la Cabeza del Hogar, interceder por las necesidades de nuetsra familia. Es nuestro privilegio como hijos de Dios, levantar un clamor por un avivamiento en nuestras familias, un reencuentro con nuestro primer amor, una renovación de votos con nuestro Dios, con nuestros Pastores, con nuestra familia.



Dios me ha dejado muy presente, que no hay por que volver atras, que en él todo lo podemos y que no se debe retroceder ni un paso, por que no estamos para retroceder, sino para avanzar.



"Para atras, ni para tomar inpulso".



1 Reyes 19:21

Y se volvió, y tomó un par de bueyes y los mató, y con el arado de los bueyes coció la carne, y la dio al pueblo para que comiesen. Después se levantó y fue tras Elías, y le servía.



Lucas 9:62

Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.





Atentamente

Pbro. S. Eduardo Rodriguez León