jueves, 8 de septiembre de 2011

INVASIÓN DE RELIGIONES ORIENTALES


Apóstol Dr. Gabriel Sánchez Velázquez y pastores
Eduardo Rodríguez León y Mario López Ramírez.

Cuando Israel iba a entrar a la tierra prometida, Dios le
advirtió de no mezclar su fe en Jehová con las ideas religiosas de los pueblos que iban a conquistar. Pero el pueblo de Israel ignoró la advertencia.

Dice Jueces 2.11-13: “Después los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los baales.  Dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que estaban en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová.  Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot.”
En nuestro tiempo, la Iglesia de Jesucristo se encuentra frente a un inminente peligro de invasión y mezcla de religiones orientales. Hasta el grado tal de que ya hay líderes cristianos que dicen que Jesucristo y Buda son la misma persona.
Encontramos ya, con mucha frecuencia cristianos que adoptan prácticas de las religiones orientales con fines terapéuticos. Lo más común es que haya cristianos haciendo sesiones de concentración o de relajación de la mente.
¿Qué está pasando? Hay una apostasía de la fe en Jesucristo y en las Sagradas Escrituras y un afán de incursionar en “otras religiones”.
Cada día es más frecuente ver jóvenes vestidos con indumentarias orientales haciendo peregrinaciones en las calles céntricas de nuestras ciudades ofreciendo oraciones e inciensos aromáticos.
Repasemos rápidamente a algunas  religiones y prácticas a las que  nos referimos:
 El Budismo con todas sus variantes. Aproximadamente en el siglo V a.C. Siddhartha Gautama, alcanzó la “iluminación”, o la verdad última mediante la cual los seres humanos se libran del ciclo de renacimientos. Es una amalgama de ideas filosóficas provenientes de  China, India y Japón 
El Hinduismo. Hinduismo es el nombre que en el siglo XIX recibió la coalición de religiones existentes en al India y su etimología se halla en la palabra persa "hindu" y el sánscrito "sindhu" que significa “río” y se refiere a los pueblos que habitan el valle del Indo.
 El Ki, Energía Universal. La energía universal que da vida y alienta todo lo existente... tendiendo siempre a buscar la armonía de los opuestos.
 Las religiones japonesas son atractivas porque enseñan el centro espiritual en el camino del kami o la representación de los poderes sagrados que se encuentran en todo el cosmos.
Y como ya quedó dicha arriba, tal vez la atracción más fuerte lo sea la búsqueda de la unidad física y mental: Yoga, Tai-Chi, Aikido y Do in. Prácticas en las que hay miles y miles de cristianos metidos sin darse cuenta que se someten a la influencia de espíritus religiosos contrarios al espíritu Santo de Dios.
Quizá la trampa del diablo es que muchos propagandistas de estas corrientes religiosas y filosóficas se presentan ante los cristianos, no como una fe religiosa, sino como una filosofía para mejorar la calidad de vida. Y los cristianos van cayendo poco a poco en las garras de estas religiones sin darse cuenta. De manera que muchos piensan que están bien siendo cristianos evangélicos y sustentando ideas y prácticas de religiones orientales; otros en cambio, ya abandonaron el Cristianismo porque encontraron “algo mejor” que les ha dado plena satisfacción.
Otro de los grandes atractivos de las religiones orientales son las fantásticas historias de sus fundadores. Por ejemplo, Confucio. Se cuenta que un kilin, animal sagrado que muy pocas personas han podido contemplar. A la madre de Confucio se le apareció un kilin y nueve meses más tarde tuvo un niño a quien los hombres debían conocer con el apelativo de K'ung-Fu-Tsé, es decir, el filósofo. En el momento de nacer, dos ángeles volaban sobre el techo de su casa mientras cuatro ancianos que representaban el espíritu de las cosas, del agua, del fuego y de la tierra, rodeaban su mansión para alejar a los espíritus malignos. A los 22 años estableció una escuela donde enseñaba a quienes querían ser sus discípulos, y se cuenta que tuvo más de 3.000. Él no escribió libro alguno, pero sus seguidores compilaron sus enseñanzas en los Discursos y Diálogos
Y se cumple la advertencia bíblica: Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,
Estando en Mérida Yucatán (México), para establecer la Comunidad Cristiana Filadelfia, una de nuestras prospectos a discípulos en una travesía por la ciudad de pronto me dijo: “Mire, este programa lo escucho todos los días y me encanta” No tuve que escuchar más que tres frases cuando le dijo: “Hermana, ese mensaje no es cristiano es panteísta, es de LA NUEVA ERA”
De Magaly Llaguno, he tomado las notas siguientes de lo que considero el más grande peligro contra el Cristianismo y que tiene que ver con LA NUEVA ERA, que se ha puesto de moda.
“Aunque la ideología de la "Nueva Era" ("New Age") surgió hace más de un siglo, en la década de los 60 comenzó el proceso de cambio de mentalidad al cual fue sometida la humanidad. La primera fase fue la que promovía la persona de Cristo en detrimento de la Iglesia. "Cristo sí, Iglesia no." "Yo creo en Cristo, pero no en los curas", decían muchos. La siguiente fase fue la de "Cristo no, Dios sí." Fue la etapa de la invasión de las religiones orientales en el Occidente cristiano. Le siguió la etapa de "lo sagrado sí, pero la religión no". Se trata de la etapa de la "Nueva Era", en la que las creencias y prácticas del ocultismo y del paganismo, con una buena dosis de religiones orientales, son consideradas "sagradas". Es la etapa de la "espiritualidad" sin religión, sin Cristo, sin Dios y por consiguiente sin Sus divinos mandamientos, es decir, sin moral.
Los "gurús" de la "Nueva Era" prometen paz y felicidad a sus seguidores, instándoles a meditar para encontrar "su verdad". Las viejas herejías están siendo utilizadas por la "Nueva Era", para justificar hasta la matanza de inocentes seres humanos no nacidos. La Coalición Religiosa para la Libertad Reproductiva (Religious Coalition for Reproductive Choice), en su folleto titulado "Abortion: Finding Your Own Truth" ("El aborto: para encontrar tu propia verdad"), aconseja a las mujeres del siguiente modo: "Las personas utilizan muchos nombres diferentes para su espiritualidad. Uno de estos nombres es Dios. Otros son: la verdad mayor, el poder superior, la voz interior, la luz interior, el espíritu de amor, el espíritu santo, o la sabiduría infinita. En estos ejercicios a menudo nos referimos a la espiritualidad simplemente como la verdad o la voz de la verdad."
Luego el folleto sugiere que la mujer que está tratando de decidir si abortar o no, lleve a cabo ciertos "ejercicios espirituales" para encontrar "su verdad". Es decir, para tomar su decisión. He aquí uno de ellos: "Ahora ponte ambas manos sobre el corazón e imagínate o recuerda algún momento en que te sentiste llena de amor, relajada y feliz. Fíjate cómo responde tu cuerpo. ¿En qué lugar de tu cuerpo tienes sensaciones de calor, relajación, suavidad y expansión? Allí es donde está tu verdad. Ponle atención a este lugar, al tratar de descubrir lo que crees que es correcto para tí."
¡Qué convenientes son estas "creencias" para aquellos que quieren justificar la matanza de inocentes niños no nacidos! Bajo este mismo "razonamiento", se podría tratar de justificar también el deshacerse de un niño con incapacidades o de un abuelo anciano y enfermo. Hoy en día se busca una espiritualidad sin Dios, se medita en el vacío, y se rechazan los principios religiosos y morales, es decir, las verdades eternas. El hombre y no Dios se ha convertido en el árbitro de lo que está bien o mal. Se ha caído en un relativismo moral, donde cada cual decide por sí mismo (es decir, a su conveniencia) lo que está "bien" y lo que está "mal".
Peor aún, según la "Nueva Era", cada uno de nosotros es Dios o parte de Dios. Esto se llama panteísmo. Basados en esa falsedad cada uno se siente con la autoridad y la capacidad para decidir o aún para inventar su propio modo de vida, su propia "moral". De esta forma muchos justifican el aborto, la eutanasia y otros crímenes basados en este exagerado concepto de la libertad y en el relativismo moral, los cuales a su vez están basados en el panteísmo egoísta de la "Nueva Era".
Para los cristianos, este es el tiempo de buscar a Dios de todo corazón y escudriñar las Escrituras porque los días son malos, y Cristo ya viene pronto por los suyos.
Dice Oses 4.6: “ Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento.
Alerta, cristianos. Cuidemos con temor y temblor de nuestra salvación.